Esta es mi historia,
pero podría ser la tuya.

miércoles, 23 de octubre de 2013

Cómo decirte, cómo contarte que...

Me fascinaría tener una razón de peso. Me encantaría no perderme ni hacer que te pierdas. Y me gustaría poder decirte que sé qué quiero. Que siempre estaré a tu lado. Que te pondré la manta en las noches más frías y te abriré la ventana en los días más calurosos. Prometerte que a mi lado todo irá como la seda. Prometerte el cielo y bajarte de vez en cuando a la Tierra. Pero las promesas acaban ardiendo y con ellas quienes las prometen. Prefiero vivir al día y demostrarlo todo con la magnitud de mis hechos. Nada de promesas, nada de planes futuros con pronóstico inestable. Pero es que soy tan despistada... soy incapaz de controlarme a mi misma, no puedo decirte que lo tendré todo bajo control. Deshojaría mil margaritas repitiendo sí quiero, no quiero  pero no encontraría ninguna razón de peso para lanzarme a la piscina. Para abrir la ventana y saltar sin más.

Soy un poco neurótica. Tiendo a dramatizar. Me dan ataques de risa locos e incontrolables. Puedes aborrecerme casi tanto como quererme. No sé si lo sabes pero soy un pequeño desastre animal. Me encanta el queso, mi número uno, el de tetilla.. entra en todos mis platos. Ponme de comer lo que quieras, acabaré echándole ketchup hasta hartar(te)me. ¿Ensalada? No si no lleva mucho vinagre. Me agobio con facilidad, y me canso aún más rápido. Ya sabes, lo bueno si breve dos veces bueno. No me pidas explicaciones porque solo vas a encontrar silencio. Necesito un lienzo entero para poder recorrerlo poco a poco con los dedos, perdiéndome, parándome, tomándome mi tiempo. No entiendo de horas, no suelo ser puntual. Estás sobre aviso. Los días pueden cambiar en un segundo, para qué ir con prisas pudiendo vivir a cámara lenta. Basta que parpadees para que te pierdas el momento. Ya sabes de mis manías, de mis costumbres, de mis miedos tontos y de lo cariñosa que me pongo a veces. Sabes que odio acostarme pronto y que adoro levantarme temprano. Que me encantan las películas de dibujos pero que ni me acerco a las de miedo. Con suerte cojo el teléfono pero no te acostumbres, no está en mi lista de quehaceres. Soy detallista pero paso de las fechas. Me gusta la constancia y el día a día, me importan los que están ahí, no los que van y vienen como el trigo en invierno. No sé por dónde coger(te)me. No me verás forzar las cosas, ellas salen por sí solas y si no lo hacen... tenemos un problema, Houston.
Deberías saber que vivo con dudas constantes, que soy espontánea por naturaleza y que anulo planes con la misma facilidad que los hago. C'est la vie. Admito que me quiero, pero estoy llena de inseguridades. Esa eterna pregunta de no saber si estás a la altura de alguien/algo. La sociedad ha puesto el listón tan alto que ni tirándome en paracaídas lo alcanzaría. No me gusta ir de compras, ni hablar de moda. Eso sí, entro a una papelería y me vuelvo loca. Los libros los devoro, en exceso. Tengo imaginación como para decorar un museo, pero lo de artista no va incluido en el precio. A veces me levanto deseando olvidar el sueño, otras en cambio estoy despierta esperando a que alguien me diga bajito, al oído, que todo esto no es más que un sueño. ¿Sabes que odio peinarme? Y pintarme, ni te cuento. Natural por excelencia, casi tanto como el zumo.

Ojalá pudiera pedirte que no cojas las maletas, que deshagas el equipaje y que te quedes conmigo. Que nunca te vayas. Pero las ilusiones, al contrario que las estrellas, han ido perdiendo su luz.. Somos solo destellos. No hay quien me entienda, pero a ti con suerte sí.
Busco miradas furtivas que hagan de lo cotidiano, una delicia. Soy un ave de paso que vuela sin rumbo aparente. Como (casi) todos.
Freud lo dejó bien claro: no hay ningún punto de partida si no se sabe bien a dónde ir...


[El título va por Sabina, por ser sus canciones la inspiración de mis palabras].

3 comentarios:

  1. Lo peor de tu nueva entrada es que es totalmente cierta, pero tengo que decir que nunca me cansaré de esas tantas cosas que tienes porque son las que te hacen especial para mí. Te quiero hermanita:)
    PD: Espero que sepas quien soy porque sino...

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  2. "Pero las ilusiones, al contrario que las estrellas, han ido perdiendo su luz..." Espero que tú nunca la pierdas, siempre serás mi estrella.
    Te llevo conmigo.
    LM.

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  3. Una entrada preciosa. Desde luego das una descripción que es totalmente fiel a a la realidad. Pero, como ya han dicho arriba, esas cosas son las que te hacen especial y por las que la gente se engancha a ti.
    Sigue escribiendo, que seguirá siendo un placer leerte.

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